Harry
Potter y el misterio del príncipe:
En
Harry Potter y el misterio del príncipe, Voldemort estrecha su
dominio sobre el mundo mágico, y el mundo muggle y Hogwarst ya no es
el refugio seguro que era antes. Harry sospecha que los peligros
pueden estar dentro del castillo, ya que cree que Draco Malfoy está
de parte de Voldemort. Harry y Dumbledore colaboran juntos para
encontrar la clave con la que se puede destruir al señor tenebroso;
para eso, Dumbledore cuenta con su viejo amigo, del que ya había
sido profesor años atrás en Hogwarst, Horace Slughorn, ya que tiene
información que podría ayudar.
Dumbledore
le enseña a Harry recuerdos de cuando él conoció por primera vez a
Tom Riddle, y un recuerdo mañado de Horace, en el que Voldemort le
preguntaba al profesor de pociones sobre una magia negra que había
encontrado en un libro de la sección prohibida de la biblioteca;
pero ya que el recuerdo estaba trucado, no se pronunciaba que magia
negra era de la que el joven hablaba; por eso, Dumbledore pidió a
Harry que se acercara a Horace hasta que llegara el momento de
sacarle la verdad.
En
la primera clase de pociones con el señor Slughorn, Harry adquiere un
libro, que perteneció al príncipe mestizo. Tenían que preparar una
poción siguiendo las instrucciones del libro, quien lo hiciera
mejor, conseguiría una poción llamada: "Felix Felicis ", con la que
todo lo que hicieras te daría suerte. Al parecer, el libro de Harry
era diferente al de los demás, ya que venían instrucciones
diferentes. A todos les estaba costando preparar la poción, menos a
Harry. Al final de la clase, era él el mejor de todos y el ganador
del premio . Harry, utilizó su premio para preguntarle a Horace el
recuerdo. Finalmente, lo consiguió. Horace le dió el recuerdo.
Harry
entusiasmado fue al despacho de Dumbledore y vió el recuerdo. La
dicha magia negra se llamaba Horrocruxes.
Dumbledore
le explicó al joven que Tom Riddle había repartido su alma en los
dichos obsequios; entonces Harry llegó a la conclusión de que si
destruía todos los Horrocruxes, mataría a Voldemort. Tenía razón.
Eran
7 Horrocruxes en los
que
Tom Riddle había repartido su alma, de los cuales 1, ya estaba
destruido, el diario de Tom Riddle.
Mientras
el curso pasaba, las hormonas adolescentes se habían encendido.
Lavender Brown había demostrado su obsesión por Ron, y Hermione
empezó a estar celosa de Lavender porque empezaba a sentir algo por
Ron; y Harry también por Ginny.
